El dirigente de la coordinadora regional de transporte público de Lambayeque, Wilson Míñope Carbajal, indicó que los dueños de seis empresas de transporte público vienen siendo víctimas de dos organizaciones criminales dedicadas a la extorsión y el cobro de cupos.

Señaló que los propietarios han accedido al pago de una fuerte suma de dinero, con la finalidad de que estas bandas delincuenciales no atenten contra la vida de los propietarios.

Míñope Carbajal mencionó que una de las empresas de transportes coaccionadas es “B. Leguía”, la cual es extorsionada por integrantes de la organización criminal «La jauría del norte», quienes, a través de mensajes de WhatsApp y llamadas telefónicas, le exigen el pago de 10 000 soles a cambio de no atentar contra su vida o sus propiedades.

«En este caso, los integrantes de esta organización criminal le han enviado constantes mensajes de WhatsApp exigiéndole que deje de meterse con sus paraderos o sus carros y que si no lo hacen, van a atentar contra su vida. Luego le han enviado otro mensaje exigiéndole el pago de la fuerte suma de dinero. La amenaza está dirigida contra los dueños de esta empresa de transporte, también contra otro gerente de una empresa que es informal y contra una inspectora de tránsito que labora en esa zona», indicó.

También son amenazados
Señaló que también se ha detectado que transportistas que tienen la ruta Chiclayo-Pimentel vienen siendo amenazados, a quienes les exigen el pago de cupos por parte de integrantes de la organización criminal «Los elegantes del norte».

«En estas cuatro empresas hemos podido identificar que están utilizando el cobro de cupos para darle seguridad, les envían mensajes de texto a través de diversos números y se hacen llamar como ‘Los elegantes de norte’. Estas organizaciones que en su momento fueron conocidas en Lambayeque, al parecer vienen reorganizándose para cometer actos delictivos en la región», mencionó.

El dirigente de los transportistas refirió que adicional a ello, también tienen un caso en el distrito de La Victoria, pero que temen denunciar ante la policía por miedo a represalias; por ello están solicitando una conversación con el general de la Policía Nacional, pero lamentó que hasta el momento no se haya dado para encontrar solución al problema.